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  • Sabiduría para la práctica
  • La Sabiduría es conocimiento aplicado
  • La sabiduría se propaga ella misma

Sabiduría para la práctica

La Sabiduría es para la práctica, no para hablar de ella continuamente. Si nos limitamos a hablar de los Maestros, los Rayos y las Jerarquías, tan sólo conseguimos descuidar nuestras obligaciones presentes.

La Sabiduría es conocimiento aplicado

Cuando el conocimiento es aplicado deviene sabiduría. Solemos obtener mucho conocimiento pero tenemos que aplicarlo en nuestra vida diaria para que se transforme en sabiduría. A través de la sabiduría experimentaremos la existencia.

La sabiduría se propaga ella misma

No tenemos que estar deseando difundir la sabiduría sin trabajarla en nosotros mismos. No hemos comprendido bien si pensamos que podemos difundir la sabiduría. La sabiduría sabe como difundirse. Sólo necesita canales.

Bendición

Habla y Silencio

Bendición

El habla es una gran bendición y un regalo de Dios a la humanidad. Sólo los seres humanos están dotados del habla. Los animales, las plantas, los minerales, los devas, los devas solares y los cósmicos no pueden hablar. Los devas, las inteligencias sutiles, existen en un plano de pensamiento en el que hay un intercambio de información en el que parece como si los devas estuvieran hablando. De esta manera nos ofrecen pensamientos que podemos traducir en acciones de buena voluntad. En esta interacción, nos convertimos en colaboradores de los devas y recibimos sus bendiciones.

Los animales se comunican entre sí. Hay muchas historias en las que personas santas hablan con animales, con águilas, cisnes o vacas. Esto es posible, aunque esta comunicación no es en un lenguaje regular. Su “lenguaje” son sonidos que transmiten mensajes desde el plano intuitivo. El desarrollo del lenguaje humano comenzó en la cuarta ola de vida de la humanidad, cuando se formaron la boca y la garganta. Antes de eso, el lenguaje consistía solo en sonidos vocálicos, como lo es ahora con los animales.

Nacer con una forma humana se considera la mayor bendición. Hay un dicho que dice que, de todos los seres manifestados, el ser humano, no los devas, es la manifestación más exaltada. Dios dio a los humanos el habla y la libertad de hablar. El uso del don del habla puede convertirse en una bendición, pero también en una maldición. Podemos usar mal el lenguaje, manipular y herir a otros con palabras, y así caemos en nuestro desarrollo. A través del lenguaje, sin embargo, también podemos difundir pensamientos positivos que son beneficiosos y edificantes. En todo lo que digamos, podemos abordar la dimensión positiva sin mencionar los aspectos negativos, aunque podamos ser conscientes de la dimensión negativa. Cuando hablamos agradable y sinceramente, con motivos puros y sin ser manipuladores, críticos o enjuiciantes, nuestras palabras tienen un efecto edificante. Pueden ofrecer inspiración y aliento, pueden ser magnéticas, curativas y una bendición, especialmente cuando irradian humor y alegría.

El uso correcto del lenguaje es una ciencia y un arte. Estamos usando el lenguaje correctamente cuando no nos entregamos a conversaciones sin sentido, sino que hablamos desde un silencio interior. Si nos conectamos repetidamente con la fuente interna, nuestras palabras se convierten en una gran bendición, no solo para nosotros sino también para quienes nos rodean. Muchas personas no pueden alcanzar su ser interior porque su conciencia se mueve sin descanso y sin rumbo en el mundo exterior. Para llegar a nuestro ser interior, primero debemos estar listos para ir hacia adentro. Tratamos de estar quietos y no orar ni cantar. En la quietud y profundidad del silencio, la audición interior se hace posible. A través de la observación prolongada de la inhalación y la exhalación, puede ocurrir un estado de quietud donde podemos experimentar como una bendición nos impregna.

Incluso una enfermedad puede ser una bendición porque nos hace hacer una pausa, examinar nuestras vidas y avanzar en una nueva dirección. Hay personas que han encontrado incluso una bendición en el encarcelamiento. Cuando Sri Aurobindo estaba en prisión, cambió totalmente y alcanzó la Luz. Cuando nos enfrentamos a limitaciones en el mundo exterior, lo más beneficioso es ir hacia adentro.

Posiciones para la Bendición

Una mirada o un gesto pueden tener un efecto de bendición. Las manos pueden transmitir diferentes tipos de energías. Podemos transmitir energías curativas o distribuir energía que eleve a otros. También hay diferentes posiciones de bendición, por ejemplo, la mano extendida llamada Abhaya Mudra, el símbolo de la valentía. En una posición de bendición del más alto orden, una palma de la persona que bendice se sostiene hacia arriba y la otra mano hacia abajo hacia la persona bendecida. En muchas imágenes y estatuas de seres divinos, una mano se levanta en bendición. Cuando vemos una estatua o imagen de lo Divino, por ejemplo, de Krishna, podemos imaginar que el principio omnipresente nos bendice a través de esta forma.

Lo Divino no se limita a una forma o símbolo.Hay tantos símbolos en la creación. Algunos no pueden aceptar esto y entienden sólo ciertas formas como expresiones de lo Divino, y algunos no consideran nada como divino. Pero también hay personas que entienden todo lo que experimentan como una bendición de Dios, incluyendo todas las dificultades. Bienaventurados aquellos que se desprenden de todos los conceptos cuando se trata de lo Divino. Infinito es infinito. Cuando definimos el Infinito, perdemos todas las oportunidades de experimentarlo. A medida que evolucionamos, nos damos cuenta de que todos los conceptos nos sirven como una gran escalera y que nosotros también somos un concepto. Dependiendo de cómo nos definamos, eso es lo que somos. Bienaventurados los que no se definen a sí mismos.

El derecho a bendecir no se le da simplemente a nadie. No todos pueden bendecir. La bendición solo puede ser dada por aquéllos que han servido lo suficiente y luego saben conscientemente desde adentro que están calificados para bendecir. La bendición a los más jóvenes por los ancianos es una cosa; los conocedores bendiciendo a los no conocedores es otra cosa. Incluso entre los gurús, uno ve muy pocos con un gesto de bendición en la mano. Buda bendijo con su palma derecha, Sathya Sai Baba bendijo con ambas manos. Podemos comenzar a usar nuestras manos para ayudar, sanar y dar bendiciones y protección a otros.

También podemos visualizar al Maestro mirándonos a los ojos con una sonrisa y un gesto de bendición. Su bendición a través de la palabra y la mirada nos lleva como un imán al nivel de “expiación” con el Dios más elevado, incluso sin nuestro conocimiento de los diversos niveles de trabajo. Se dice que cuando los discípulos adoran a un Maestro, el Maestro media con Dios para que los discípulos puedan ser bendecidos. Cuando los discípulos adoran a Dios, entonces Dios los dirige al Maestro.

La Bendición del Maestro

Encontrar un maestro es una bendición de lo Divino, el cual, de esta manera, ayuda a aquéllos que sincera y fervientemente buscan. Un maestro perfecto o Sadguru es la bendición más grande que se nos puede otorgar. Un maestro tan genuino trata de muchas maneras de ayudar al discípulo que está alineado con él. A menos que el discípulo se separe explícitamente del maestro, el maestro continuamente otorga bendiciones a través de miradas y pensamientos para permitir que el discípulo complete su práctica de yoga mientras realiza sus deberes diarios. Se dice que una persona sobre quien el maestro dirige su mirada bendita y auspiciosa puede completar el Yoga en doce encarnaciones. No sólo el maestro, sino muchos ayudantes del plano superior trabajarán con nosotros. Esto también aumenta nuestra confianza.

Las enseñanzas de sabiduría de la Jerarquía son en sí mismas una gran bendición. Muchos de los grandes maestros están dispuestos a expresarse a través de la plataforma de la WTT (World Teacher Trust) para permitir la expresión de la conciencia a través de nosotros. A medida que cumplimos sus metas, somos también simultáneamente premiados con la energía del Maestro del Mundo. En la medida en que nos ofrecemos para el cumplimiento de los nobles objetivos de una organización jerárquica y dedicamos nuestro tiempo, dinero y energía a este trabajo, en la misma medida somos satisfechos. La devoción que expresamos nos permite la bendición inmediata. Los iniciados nos bendicen cuando realizamos actos de buena voluntad. Esto trae alegría, y como bendición, más oportunidades para actos de buena voluntad vienen a nosotros. Cuando estamos equilibrados, hacemos el trabajo sin hablar mucho de ello y nos convertimos en un medio para la Conciencia Maestra. Podemos observar cómo trabaja el Maestro a través de nosotros y qué tan bien se realizan las actividades.

Formas de Bendición

La bendición puede tomar muchas formas; lo importante es que seamos conscientes y la sintamos. Aquí hay algunas otras formas de bendición.

En tiempos pasados, los santos a veces visitaban hogares para descansar por la noche. Eran bien atendidos por la familia de la casa. Es una gran bendición ofrecer comida a tales santos. Al recibir algo allí, quitan la deuda (karma) de esa casa y, por tanto, liberan a los dadores de sus deudas. Cuando visitamos una casa, debemos pedir las bendiciones del Señor sobre la casa y sus ocupantes incluso antes de entrar en ella. Además, al tener compasión por los necesitados e indigentes y tratar de satisfacer sus necesidades básicas, podemos distribuir energía beneficiosa al área circundante.

Si sabemos que hay sabios en nuestro entorno, es bueno ir a ellos, presentar nuestros respetos con frutas y flores, pedir sus bendiciones y permanecer en su aura durante unos minutos, eso es todo lo que se necesita. Los lugares donde los iniciados han vivido o donde ha ocurrido mucha sanación e iluminación todavía contienen estas energías y debemos alinearnos con su presencia. Es bueno visitar estos lugares, sintonizar con la energía y pasar unos minutos allí tranquilamente. Esto tiene un efecto sutil en nosotros, incluso si nuestra mente consciente no lo reconoce de inmediato. También se considera un acto sagrado proteger el lugar de un iniciado. Así pudimos alquilar una habitación en Suiza cerca de Einsiedeln en el lugar donde nació Paracelso. Visitar esta sala de vez en cuando nos da energía y bendiciones.

Fuentes utilizadas: K.P. Kumar: Enseñanzas del Señor Maitreya, vol. 2; notas de diversos seminarios. Dhanishta Publications, Visakhapatnam, India (www.aquariusbookhouse.com)