por el Dr. Ekkirala Krishnamacharya Vista Previa de los Libros - General
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Conferencia dada en Ginebra el 4-9-1983

Esta noche se comentó que el Dr. Krishnamacharya explica las cosas de tal modo que toda la gente pueda comprender. La conferencia de hoy puede ser una excepción a esto. De forma extraña, existe una ley en el espiritualismo que siempre que nos sintamos demasiado confiados o un poco demasiado entusiastas de algo, inmediatamente la situación nos previene que no lo hagamos la Naturaleza quiere siempre que seamos mejores. Si no nos gusta enfrentarnos a tales advertencias, la naturaleza gradualmente comienza a callarse por el momento, porque el sujeto no está listo para recibir las advertencias.

Eso es lo que sucede cuando desarrollamos fe en la naturaleza, en Dios y el espiritismo. Mientras que preferimos vivir sin fe, estamos aparentemente seguros, ya que no se nos pide que afrontemos tales situaciones. Pero, por supuesto, tal seguridad nos lleva siempre a la crisis, mientras que la serie de advertencias nos alejan de la crisis día tras día. Esta es una de las extrañas leyes del ocultismo. Nos afecta indefectiblemente y no hay excepciones.

Y el tema de hoy, 'Las Cadenas Planetarias' es un desafío no para el Dr. Krishnamacharya, sino para los Maestros de la Sabiduría Eterna. Es un tema desafiante para los Maestros mismos, porque después de explicar hasta cierto punto, sintieron muchas veces que no podían explicarlo más allá del grado de mistificación, porque las alturas del tema son infinitas y las profundidades son auto sofocantes. Esa es la naturaleza del tema que se da hoy, pero como todos somos estudiantes y estamos viajando en la misma dirección, intentemos abrir las pequeñas puertas de la ventana oriental e intentemos recibir el rayo de luz que contiene los siete rayos en él. Y acerca de la luz, no tenemos nada para hablar mucho; existe todo para disfrutar y recibir, y para probar la verdad exponiéndonos a ella..

Muchos de ustedes habrán leído el maravilloso libro llamado la Doctrina Secreta por Madame Blavatsky. La pregunta es exactamente como la pregunta “¿Han aprendido a nadar a través del océano? Esto es lo que queremos decir por leer la Doctrina Secreta de Madame Blavatsky de principio a fin. Puedo interrogarte porque no sé nadar, porque me paro en la orilla y pregunto a los otros quienes están nadando. El libro la Doctrina Secreta es un comentario a cierto grupo de estrofas llamadas estrofas arcaicas. La palabra arcaica significa, lo más antiguo. Existen tres Fuentes para estas estrofas, y una Fuente común para las tres Fuentes.

Las estrofas textuales tradicionales recibidas por los antiguos Tibetanos son una. Las escruturas tradicionales Indias, erróneamente llamadas escrituras Hindú, es otra. Así es como llamamos a los textos Védicos y sus comentarios. Pero recuerden que los textos Védicos, o los Puranas o los Upanishads, no pertenecen al Hinduismo o a los Hindús, así como el Cristo y sus enseñanzas no pertenecen a los Cristianos. Los Cristianos solamente son una secta de gente que querían seguir la luz de Cristo, mediante la angosta ventana denominada religión. De forma similar, los Hindús, son una secta de gente que querían comprender y seguir lo que está ahí en los textos Védicos. La palabra Hindú no existía antes del siglo dieciséis. Fueron los Musulmanes quienes invadieron a la India e inventaron el nombre Hindú, así como fue Max Muller y sus seguidores quienes inventaron las maravillosas palabras Arias y no-Ario. Existen muchas falsificaciones y menjurjes que no pertenecen a estas escrituras antiguas. Así que tratemos de meditar sobre lo común de las escrituras, más allá de la angosta idea de cualquier religión. Entonces podemos comprender lo que es Doctrina Secreta.

Existen entre ustedes algunas personas quienes están siguiendo mis clases en las escrituras Indias. Ellos, hasta cierto punto, han visto lo que es la Cosmología de las escrituras antiguas. Ustedes han visto una oración que dice así: “Siete son las capas; tres veces siete son los palitos de combustible para el ofrecimiento de fuego llamado la creación” que incluye la cosmogénesis y la antropogénesis de cada unidad de creación. El primer principio es lo que se llama el principio septenario que existe en todo y que opera en cada unidad de la naturaleza. La unidad más pequeña que el pequeño cerebro humano puede entender es el átomo, y la unidad más grande que la pequeña mente humana puede entender es la unidad globo espacial que contiene millones y millones de galaxias. Cada galaxia incluye en ella millones y millones de Sistemas Solares, y cada Sistema Solar es un átomo de su propia magnitud. El lapso promedio de un Sistema Solar que la mente humana entiende como millones y millones de años es una fracción de segundo en la danza titilante del átomo que llamamos Sistema Solar. Recordemos este trasfondo como el gran escenario del teatro sobre la plataforma en la cual se está desarrollando todo el drama.